Prisión y absolución en caso de contrabando de vida marina

SAN DIEGO — Los casos contra una pareja acusada de intentar contrabandear vida marina en un automóvil por el puerto de entrada de San Ysidro, concluyeron este mes con resultados muy diferentes.

Alan Ren, conductor y dueño de dos restaurantes chinos en Nueva York, fue sentenciado el 2 de febrero a 10 meses de prisión, una multa por 7500 dólares y el pago de 16600 dólares en restitución, luego de declararse culpable el año pasado.

Su pasajera, Wei Wei Wang, llevó su caso a juicio y fue absuelta esta semana en la corte federal de San Diego de cuatro cargos, incluido contrabando e importación ilegal de vida silvestre.

La pareja fue detenida en la frontera en febrero de 2016 cuando intentaban cruzar. Ren le dijo al oficial de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos que habían estado de compras y que no tenían nada que declarar, según los registros judiciales. Pero el oficial vio maletas y bolsas de basura en la parte trasera de la minivan y preguntó qué contenían.

Ren primero dijo ropa, pero luego admitió que había pepinos de mar para amigos y familiares.

El oficial encontró y decomisó 172 libras de pepino de mar seco, especie Isostichopus fuscus protegida por la Convención de Comercio Internacional de Especies Amenazadas o CITES, además encontraron 83 libras de abulón negro congelado, una especie en peligro de extinción que se encuentra en California y Baja California.

Ambas especies requieren autorización para ser exportadas a Estados Unidos.

En su acuerdo de culpabilidad, admitió que no tenía los permisos adecuados para importar o exportar los mariscos o para actuar como importador comercial de peces o vida silvestre.

Algunos de los productos marinos se encontraron en un equipaje que parecía pertenecer a Wang, quien compartía un departamento en Tijuana con Ren al momento de intentar cruzar la frontera, dijeron los fiscales.

Ren dijo a los investigadores que contrató a Wang para manejar las finanzas de su empresa de productos marinos, de acuerdo con los registros judiciales.

Davis escribe para el U-T.