Como un cuento de hadas: de la cárcel a la pasarela

A veces, las historias de exprisioneros cuando son liberados no son fascinantes.

Muchos recaen en los malos pasos y siguen delinquiendo, pero para otros su entorno se vuelve algo totalmente diferente cuando se integran a la sociedad. Así le sucedió a Jeremy Meeks al ser liberado hace unos días de la prisión.

A pesar de ser un exconvito, su rostro se volvió uno de los más populares en las redes debido a la fama que se ha ganado como el “chico guapo” de la cárcel. Algunos usuarios llegaron incluso a comentar que si “a poco ser tan guapo es ilegal”.

Y es que, para quienes no saben que fue arrestado por posesión ilegal de armas en junio de 2014, tal vez su fotografía a simpe vista pareciera ser la de un modelo. La imagen no ha pasado desapercibida para las compañías de moda y pasarelas, quienes mostraron su interés en contratarlo.

A Meeks le comenzaron a llegar ofertas de trabajo nada más poner el pie en la calle. A sus 32 años, ha firmado un contrato con la agencia de modelaje White Cross Management.